La Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó una resolución que confiere al secretario general del organismo, Luis Almagro, una mayor autoridad para supervisar el proceso de transición en Guatemala. Esta iniciativa, impulsada por diversos países, busca garantizar una transición democrática y evitar irregularidades durante el cambio de poder entre el actual mandatario, Alejandro Giammattei, y el presidente electo, Bernardo Arévalo de León.
La resolución aprobada por aclamación por los representantes de los 34 países miembros activos de la OEA, solicita a Luis Almagro que se reúna con representantes del Ministerio Público, ya que se le acusa de perseguir penalmente al Movimiento Semilla desde que Arévalo de León pasó a la segunda vuelta electoral. Además, la OEA enfatiza en la importancia de la separación de poderes y que el uso del ordenamiento jurídico como herramienta de intimidación no es aceptable.
El Movimiento Semilla, partido político al que pertenece el presidente electo, fue suspendido de manera provisional por el Registro de Ciudadanos del Tribunal Supremo Electoral de Guatemala. Esta medida ha generado incertidumbre y ha recibido críticas de varios países, incluidos Estados Unidos, Canadá, Chile y Bolivia.
Por otra parte, el Congreso de Guatemala ha decidido no reconocer a la bancada del Movimiento Semilla por orden del juez penal Fredy Orellana, quien enfrenta acusaciones de corrupción y de socavar la justicia.
El proceso de transición del poder está programado para iniciar el 4 de septiembre y culminar con la toma de posesión de Bernardo Arévalo de León y la vicepresidenta electa, Karin Herrera, el 14 de enero de 2024.
Fuentes:
– Organización de Estados Americanos (OEA)
– Departamento de Estado de Estados Unidos