El tiempo ha pasado rápidamente y Ana Obregón lo sabe muy bien. Su hija, a quien llama cariñosamente “Anita”, ya tiene cinco meses de edad. Este periodo ha estado lleno de emociones y aprendizajes tanto para Ana como para su hija.
Ana compartió en sus redes sociales la celebración del quinto mes de vida de Anita, donde nadaron juntas en la piscina y soplaron velas en una tarta de biberones. Estos momentos especiales y sencillos quedarán grabados en el corazón de ambas.
En esta celebración, Ana también recordó y expresó su cariño hacia Álex Lequio, el padre de Anita, quien falleció. A pesar de su ausencia física, Ana mencionó que su amor sigue presente en el corazón y en cada gesto hacia su hija.
Este quinto mes ha sido un hito importante para Ana y Anita, un tiempo en el que han crecido juntas, aprendido y, sobre todo, amado. A pesar de las ausencias dolorosas, la vida continúa y hay momentos para celebrar y agradecer. El amor y la unión de madre e hija son una prueba de ello.
Por otra parte, Ana Obregón, a sus 68 años, ha dejado preparado su testamento para asegurarse de que su hija quede bajo la custodia de una persona de su total confianza en caso de su fallecimiento. Su sobrina Celia Vega-Penichet, hija de su hermana Celia, ha sido designada como la persona encargada de cuidar a Anita. Ana confía plenamente en ella y ha tomado esta decisión después de una cuidadosa reflexión.
Ana Obregón ya tiene preparado el testamento
A sus 68 años, Ana Obregón ha dejado claro que ha tomado todas las previsiones necesarias para garantizar el bienestar de su hija en caso de que ella fallezca. En su testamento, ha designado a su sobrina Celia como la persona que se encargará de cuidar a la bebé. Ana confía plenamente en ella y ha meditado esta decisión.
Celia Vega-Penichet, de 31 años, hija de la hermana de Ana, es una desconocida para muchos, pero es muy querida por Ana Obregón. La actriz y presentadora asegura que esta decisión está pensada desde el principio y que Celia tiene un gran cariño por Anita.
Ana Obregón ha tomado todas las precauciones necesarias para asegurar el bienestar de su hija en caso de su ausencia y confía en que Celia será la mejor persona para cuidar de Anita.