La realidad económica de muchas personas en España es cada vez más precaria. A pesar de que los ingresos han aumentado en un 12% desde 2008, los gastos domésticos han aumentado en un 30% debido, sobre todo, al elevado precio de la vivienda, el alquiler, los alimentos y los servicios básicos como la luz y el gas. Esta situación ha llevado a que un gran número de hogares, incluso aquellos que tienen ingresos, se encuentren por debajo del umbral de la pobreza severa después de pagar la vivienda y los suministros básicos. Según el informe ‘Ingresos y gastos: una ecuación que condiciona nuestra calidad de vida’ de Cáritas, más de tres millones de hogares se encuentran en esta situación.
En busca de soluciones económicas y sostenibles, cada vez más familias se ven obligadas a recurrir al subarriendo de habitaciones. En los últimos cinco años, el porcentaje de familias que subalquilan habitaciones ha aumentado notablemente, llegando al 6,6% en 2022, lo que equivale a más de 1,2 millones de hogares. Además, se ha registrado un incremento considerable en el número de familias que viven en viviendas inseguras, como pisos compartidos o cedidos sin contrato en vigor, o en situación de desahucio. Del mismo modo, ha aumentado el porcentaje de familias que viven en viviendas inadecuadas, que no cumplen con las condiciones mínimas dignas para la vida cotidiana.
En cuanto a los ingresos, aunque ha habido mejoras en el mercado laboral, como un aumento en el empleo y una mayor estabilidad en el trabajo, el incremento de los gastos ha compensado en gran medida estos avances. Además, se ha observado una desigualdad en el crecimiento de los ingresos, ya que el aumento ha beneficiado principalmente a quienes ya tienen más recursos económicos. Por otro lado, el aumento de los gastos, especialmente en vivienda y servicios básicos, ha dejado a muchas familias con ingresos por debajo del umbral de pobreza severa.
La situación es alarmante y requiere una solución inmediata. Es fundamental que la sociedad en su conjunto tome conciencia de este problema y busque alternativas para garantizar una vida digna para todas las familias. Desde Cáritas se hace un llamado a la acción, ya que esta realidad de fragilidad económica en la vida cotidiana de las familias no ha dejado de aumentar en los últimos años.
Preguntas frecuentes
1. ¿Por qué los gastos domésticos han aumentado tanto?
Los gastos domésticos han aumentado en gran medida debido al incremento del precio de la vivienda, los alquileres, los alimentos y los servicios básicos como la luz y el gas.
2. ¿Cuántos hogares se encuentran por debajo del umbral de la pobreza severa?
Según el informe ‘Ingresos y gastos: una ecuación que condiciona nuestra calidad de vida’ de Cáritas, más de tres millones de hogares se encuentran por debajo del umbral de la pobreza severa una vez pagada la vivienda y los suministros básicos.
3. ¿Qué alternativas están utilizando las familias para hacer frente a esta situación económica?
Cada vez más familias se ven obligadas a recurrir al subarriendo de habitaciones como una forma de generar ingresos adicionales. Además, un número significativo de familias vive en viviendas inseguras o inadecuadas.
4. ¿Ha habido mejoras en los ingresos de las familias?
Aunque ha habido mejoras en el mercado laboral, como un aumento en el empleo y una mayor estabilidad en el trabajo, el incremento de los gastos ha compensado en gran medida estos avances. Además, se ha observado una desigualdad en el crecimiento de los ingresos.