El fallo del Juez William H. Orrick

El fallo del Juez William H. Orrick

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Title: Desarrollo legal relativo al uso de inteligencia artificial en obras creativas generadas artificialmente

El Juez Federal William H. Orrick de la Corte del Distrito Norte de California emitió una orden en respuesta a la solicitud de rechazo presentada por Stability AI en relación con la demanda presentada por los artistas Sarah Andersen, Kelly McKernan y Karla Ortiz por violación de derechos de autor, violación de derechos de imagen, competencia desleal y violación contractual.

Sin profundizar en el contenido de la decisión, es importante reconocer las dificultades con las que se encontraron los abogados de los artistas para presentar una demanda con problemas técnicos evidentes, cuya complejidad se refleja en esta orden judicial.

Violación de derechos de autor por parte de Stable Diffusion

La principal teoría de los demandantes sobre la violación directa de derechos de autor se basaba en la creación y el uso por parte de Stability de “Training Images”, imágenes de entrenamiento tomadas de la red y posteriormente utilizadas para entrenar a Stable Diffusion.

Los demandantes argumentaron que la violación directa por parte de Stability AI ocurrió porque la compañía “descargó o adquirió copias de miles de millones de imágenes cubiertas por derechos de autor sin autorización para crear Stable Diffusion y utilizó esas imágenes para entrenar el modelo, almacenando y fusionando las obras en Stable Diffusion como copias comprimidas”.

Esta afirmación fue considerada técnicamente no demostrada por el Juez, ya que Anderson no había identificado cuáles de sus obras registradas en la Oficina de Derechos de Autor de EE. UU. habían sido utilizadas como imágenes de entrenamiento, y la supuesta violación se basaba simplemente en el resultado de una búsqueda de su nombre en el sitio web ihavebeentrained.com.

El rechazo en este punto se basa en aspectos formales, como la falta de registro de las obras supuestamente violadas en la Oficina de Derechos de Autor de EE. UU., y en la falta de pruebas claras y suficientes.

El juez también tomó nota de la declaración de los demandantes sobre la similitud de las obras generadas por IA, pero no “idénticas” a las obras de los artistas supuestamente violados y, dado que Stable Diffusion es un programa de código abierto, afirmó que “los demandantes deberán presentar una teoría clara sobre las copias comprimidas de las imágenes de entrenamiento y proporcionar evidencia de cómo Stable Diffusion, un programa de código abierto en parte, opera en relación con las imágenes de entrenamiento”.

Aunque personalmente tengo dudas sobre esta interpretación, especialmente en relación con los ingresos comerciales de programas supuestamente de código abierto, esta postura del juez deja abierta la posibilidad de que el conjunto de datos de entrenamiento pueda estar protegido por el derecho de uso justo.

La carga de la prueba recae en los artistas

Según la orden, los artistas deberán demostrar la existencia de pruebas de obras de infracción creadas por herramientas de IA que sean idénticas a su material cubierto por derechos de autor.

Es fácil ver la dificultad técnica que se anticipa en la presentación de la reclamación, incluso en la fase de integración, dado que “ninguna de las imágenes generadas por Stable Diffusion en respuesta a un comando de texto específico coincide con una imagen específica en los datos de entrenamiento”.

El papel de DeviantArt y Midjourney

En cuanto al papel de DeviantArt y Midjourney en la violación, las teorías de los demandantes no fueron aceptadas por el juez. Orrick cuestionó si Midjourney y DeviantArt, al ofrecer el uso de Stable Diffusion a través de sus aplicaciones y sitios web, pueden ser consideradas responsables de una infracción directa si el sistema de IA “solo contiene algoritmos e instrucciones que se pueden aplicar para crear imágenes que incluyen solo algunos elementos de una obra cubierta por derechos de autor”.

El juez considera que “los demandantes deben aclarar su teoría sobre Midjourney: ¿se basa en el uso de Stable Diffusion por parte de Midjourney, en el uso independiente de Midjourney de imágenes de entrenamiento para entrenar el producto Midjourney o en ambos?”.

Esto deja abierta la posibilidad de futuras ampliaciones de la demanda.

Infracciones secundarias

Las acusaciones de infracciones secundarias, violación de la Ley de Derechos de Autor del Milenio Digital por la eliminación de información de gestión de derechos de autor, violación de derechos de imagen, violación contractual y competencia desleal también fueron rechazadas.

“Se permite a los demandantes enmendar la demanda para aclarar su teoría y agregar hechos plausibles sobre las ‘copias comprimidas’ en Stable Diffusion y cómo esas copias están presentes en los productos DreamStudio, DreamUp y Midjourney ofrecidos a terceros”, escribió Orrick. “La misma claridad y acusaciones plausibles deben ser ofrecidas para potencialmente responsabilizar a Stability por el uso de su producto, DreamStudio, por parte de terceros”.

Violación de derechos de imagen

En cuanto a la acusación de violación de derechos de imagen, con la afirmación específica de que las empresas involucradas utilizaron comercialmente los nombres de los artistas, el juez, al aceptar la solicitud de rechazo, destacó que no se habían presentado suficientes pruebas para respaldar las argumentaciones de que las empresas habían utilizado las identidades de los artistas.

Una vez más, el juez se limitó a declarar una falta de prueba suficiente en lugar de emitir una decisión sustantiva sobre las violaciones.

Conclusiones

Aunque esta orden judicial parece haber dado prioridad a los aspectos formales y procedimentales, evitando entrar en los aspectos sustantivos, los artistas McKernan y Ortiz han confirmado su determinación para seguir adelante con la acción legal. Es evidente que abordar los desafíos legales y técnicos relacionados con el uso de inteligencia artificial en la generación de obras artísticas sigue siendo un terreno complicado y controvertido.

FAQ:
1. ¿Cuál es el caso jurídico descrito en el artículo original?
El artículo hace referencia a una demanda presentada por artistas estadounidenses contra la empresa Stability AI por violación de derechos de autor, violación de derechos de imagen, competencia desleal y violación contractual en relación con el uso de inteligencia artificial en la generación de obras artísticas.

2. ¿Cuál fue el fallo emitido por el Juez William H. Orrick?
El Juez Orrick emitió una orden en respuesta a la solicitud de rechazo presentada por Stability AI, en la cual se rechazaron varias acusaciones de los artistas demandantes, como violación de derechos de autor y violación de derechos de imagen. Sin embargo, se permitió a los demandantes enmendar su demanda para aclarar ciertos aspectos.

3. ¿Cómo se vio afectada la teoría de violación de derechos de autor por parte de Stable Diffusion?
El juez consideró que no había pruebas suficientes para respaldar la afirmación de los demandantes de que Stable Diffusion había violado sus derechos de autor al utilizar imágenes sin autorización. También se puso en duda la identificación de las obras específicas utilizadas como imágenes de entrenamiento.

4. ¿Cuál fue el papel de DeviantArt y Midjourney en la demanda?
El juez cuestionó si DeviantArt y Midjourney podían considerarse responsables de una violación directa, ya que sus plataformas ofrecían el uso de Stable Diffusion pero solo contenían algoritmos que podían ser aplicados a obras cubiertas por derechos de autor. Se dejó abierta la posibilidad de una ampliación de la demanda.

5. ¿Se encontraron pruebas de violación de derechos de imagen?
El juez determinó que no se habían presentado suficientes pruebas para respaldar las acusaciones de los demandantes de que las empresas demandadas habían utilizado comercialmente los nombres de los artistas sin autorización.

6. ¿Qué sigue para los artistas demandantes?
A pesar de este fallo, los artistas McKernan y Ortiz han confirmado su intención de continuar con la acción legal. Aunque se han encontrado dificultades técnicas y legales en el caso, la controversia en torno al uso de inteligencia artificial en obras creativas generadas artificialmente se mantiene.